martes, 31 de marzo de 2009

Confirmado: Rodolfo Walsh nunca fue agente de la CIA


Por Miguel Russo

Quizás por esa tendencia a brindarle mayor preponderancia a lo urgente que a lo importante, en el diario de ayer cometí un error más que imprudente, que nada tiene que ver con el autor de la nota Julio Ferrer, ni con el entrevistado, el periodista Enrique Arrosagaray, autor del libro Rodolfo Walsh en Cuba. Prensa Latina, militancia, ron y criptografía. Y mucho menos con el genial Rodolfo Walsh, aunque el error lo tuvo como protagonista.
En un intento por hacer que el texto en cuestión entrara en el espacio que se le había adjudicado, modifiqué (entre los apuros por el minirecital de Charly García y la internación de Mercedes Sosa: lo urgente) una pregunta de Ferrer a Arrosagaray (lo importante). La pregunta "editada" quedó ridícula, absurda, lejana a la rigurosidad de Ferrer y su entrevistado: "En abril de 1961, Cuba sufre una derrota histórica en Bahía de los Cochinos en manos del imperialismo norteamericano. Y parece que Walsh jugó un papel importante...".
Por supuesto, la derrota fue del imperialismo norteamericano a manos del pueblo y ejército cubano; Walsh nunca fue un agente del imperialismo, y sí tuvo mucho que ver con ese triunfo cubano.
Por respeto a Walsh, Ferrer, Arrosagaray y todos ustedes, se reproduce la pregunta y la respuesta como debería haber salido.
–En abril de 1961 el imperialismo norteamericano y sus mercenarios invaden Cuba sufriendo una derrota histórica en Bahía de los Cochinos. Walsh jugó un papel muy importante...
–El papel de Walsh fue singular. Aún es poco conocido y algunos aspectos de este tema aún son discutidos, incluso por sus propios compañeros de Prensa Latina. También acá, en Buenos Aires. Lo cierto es que un día, en la agencia, Masetti le dio a Walsh una tira larguísima de papel de teletipo con textos ilegibles para cualquiera. Sospechó, y le pidió a su amigo Walsh que tratara de descubrir si ahí había algo importante. En definitiva, Walsh descifró esos textos y se confirmó que eran cables encriptados que la CIA enviaba desde Guatemala a Washington. Muchos cables con distintos temas, pero uno de ellos hablaba de un tema crucial...
–De la inminente invasión....
–De la preparación en Guatemala, de un grupo numeroso de cubanos y otras yerbas, que estaban recibiendo instrucción militar con financiamento de Estados Unidos, con el objetivo de lo que vos decís, invadir Cuba para derrocar al gobierno revolucionario. Muchos días estuvo trabajando Walsh para descriptar eso. Uno de los misterios que se planteó más de uno es desde cuándo Walsh sabía criptografía. Su esposa Poupée me dijo que su marido tenía un librito de una colección francesa llamada "Je Sais Tout", que enseñaba en pocas páginas, esa técnica tan usada en el espionaje desde siempre. Y me contó también que el trabajo lo hizo en el comedor de su casa, pero me lo contaba con tono de protesta porque le había desordenado toda la casa. En ese momento ellos vivían en el edificio Focsa, el más alto de la Isla en ese entonces, creo que sigue siéndolo. A tres cuadras de la Agencia.

Publicado en la sección Cultura del Diario Diagonales de La Plata.

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